 |
| El Celta B recibe en Barreiro al CP Cacereño el próximo domingo a las 16:00h. |
Tras sumar un empate ante la UD Logroñés en el difícil campo de Las Gaunas, el Celta B consiguió acercarse un poco a la permanencia en Segunda B. Esta semana el filial tendrá otra ocasión de seguir remontando, ya que volverá a jugar en casa. Un encuentro para el que ya conoce el horario y en el que recibirá en la 27ª jornada de Liga al CP Cacereño.
El choque se disputará este domingo 28 de febrero a las 16:00h. en el Campo Municipal de Barreiro. Como siempre, los abonados del Club podrán acceder de manera gratuita con su carnet en vigor de la temporada 2015/2016.
El filial llega a la vigesimoséptima cita de la temporada en 18ª posición con 25 puntos después de cosechar seis victorias, siete empates y trece derrotas. Ante el conjunto extremeño, el filial tratará de seguir en la buena dinámica tras sumar cuatro de los seis últimos puntos.
El conjunto entrenado por Ángel Marcos visitará al filial tras perder por 0-1 ante el CD Guijuelo el pasado fin de semana. Un partido surrealista en el que el portero Montiel pidió el cambio minutos después de marcarse en propia el único gol del encuentro, tras un disparo del conjunto rival sin peligro aparente. En el partido de la primera vuelta, el segundo equipo céltico cayó derrotado por 4-2.
El rival será el CP Cacereño, un club fundado en 1918 como CD Cacereño y renombrado al actual en 1975, que ocupa la 17ª posición en la tabla con 25 puntos, exactamente los mimos que el filial tras seguir una dinámica paralela. Ambos conjuntos han cosechado idéntico número de victorias y empates.
Tras una breve adaptación a las ideas del nuevo técnico, el Celta B se muestra más solido en tareas defensivas y los resultados comienzan a llegar. Habrá que esperar a las próximas semanas para ver si se confirma la dinámica positiva, en un filial que sin embargo ha visto mermada la presencia de canteranos. Solamente tres fueron titulares en el último partido.
Este domingo, anima al Celta B en Barreiro.
Publicado por Edgar Garrido
