El pasado domingo el Celta B disputaba su último partido del año ante el Coruxo FC, el mismo rival al que se había enfrentado exactamente 364 días antes. En aquella ocasión el filial ganó el partido disputado en O Vao, pero en esta ocasión solamente logró empatar en un disputado e intenso partido.
De un año a otro, han pasado tres técnicos -Javi López fue destituído y Toni Otero ocupó su lugar-, Javier Torres Gómez llegó al equipo en verano, algunos jugadores han dejado el club y otros muchos han llegado para reforzar al filial, también este verano varios canteranos fueron ascendidos al Celta B. Esta misma semana conocíamos el fichaje de Luís Gustavo Ledes.
Sin embargo, todo sigue igual en el Celta B. Con un matiz muy importante: no es que las cosas se estén haciendo peor, todo lo contrario. El filial ha adquirido un estilo de juego a imagen y semejanza del primer equipo, con jugadores que rotan en función de las necesidades que exija el técnico. Pero el principal problema de este 'nuevo' Celta B no termina de tener fortuna, sin ser un excusa.
A pesar de tener claro lo que quiere y cómo ejecutarlo, se le han atragantado todos los partidos fuera de casa, con la excepción de un empate en las primeras jornadas. En Barreiro ha creado su pequeño fortín. Y eso es lo que le permite llegar al parón navideño fuera de descenso, aunque solamente dos puntos por encima de la zona de peligro.
Sin llegar a tener el rendimiento deportivo esperado, desde el club al menos sí que ha servido de trampolín al primer equipo: Josep Señé pasó en verano a formar parte de la primera plantilla; Néstor Díaz, Diego Alende y Pape Cheikh ya han debutado con el primer equipo y otros como Iván Villar o Brais Méndez han sido llamados por la Selección Española Sub-19. Es decir, al fin y al cabo, la razón de ser de un filial.
Una plantilla compensada, con juventud y experiencia
En este primer tramo de la temporada 2015/2016 el Celta B ha conseguido formar un bloque que combina juventud con experiencia. En la portería Néstor Díaz (270 minutos) se ha hecho un hueco en las últimas semanas en un puesto que Iván Villar (1.350 min.) había defendido hasta ahora. Mientras, Ángel Fraga espera su oportunidad.
En línea defensiva, solo dos jugadores esperan su debut: Sergio de Paz y Francisco Duclós. El resto se han ido repartiendo los minutos, ya sea por rotaciones o sanción. Kevin lo ha jugado prácticamente todo (1.615 min.), seguido por Jonathan de Amo (1.290) y David Goldar (1.245). Lucas Olaza (888) y Samu Araújo (1.008) que se han ido alternando la posición, aunque en la últimas semanas juegan juntos.
Caso aparte es el de Diego Alende, que con el filial ha jugado 518 minutos y otros 130 con el primer equipo, haciendo por el momento un total de 648 minutos en su último año en edad juvenil.
El mediocampo es quizás la línea que tiene un claro dueño, Borja Fernández. El canterano es quien lleva la manija del filial con un total de 1.440 minutos jugados por el momento. Inmediatamente después, el jugador más utilizado es Pape Cheikh (801), seguido de Jordan (712), Borja Peña (263), Brais Méndez (62) y Martín Fuentes (4 minutos), debutante este fin de semana.
Por delante, multitud de jugadores se han alternado las posiciones, aunque Luis Rioja ha sido el más utilizado por Javier Torres con 1.373 minutos disputados, seguido por dos de los nuevos Franco Fragapane (963) y Rubén Ramiro (895) y un gran Julio Delgado (839).
En la delantera, el referente ha sido por el momento Borja Iglesias (1.480), seguido de un Guille Andrés (683) que se ha destapado en las últimas semanas y, por último, un Javier Que Delgado que aún no ha disputado demasiados minutos, tan solo 58.
De un año a otro, han pasado tres técnicos -Javi López fue destituído y Toni Otero ocupó su lugar-, Javier Torres Gómez llegó al equipo en verano, algunos jugadores han dejado el club y otros muchos han llegado para reforzar al filial, también este verano varios canteranos fueron ascendidos al Celta B. Esta misma semana conocíamos el fichaje de Luís Gustavo Ledes.
Sin embargo, todo sigue igual en el Celta B. Con un matiz muy importante: no es que las cosas se estén haciendo peor, todo lo contrario. El filial ha adquirido un estilo de juego a imagen y semejanza del primer equipo, con jugadores que rotan en función de las necesidades que exija el técnico. Pero el principal problema de este 'nuevo' Celta B no termina de tener fortuna, sin ser un excusa.
A pesar de tener claro lo que quiere y cómo ejecutarlo, se le han atragantado todos los partidos fuera de casa, con la excepción de un empate en las primeras jornadas. En Barreiro ha creado su pequeño fortín. Y eso es lo que le permite llegar al parón navideño fuera de descenso, aunque solamente dos puntos por encima de la zona de peligro.
Sin llegar a tener el rendimiento deportivo esperado, desde el club al menos sí que ha servido de trampolín al primer equipo: Josep Señé pasó en verano a formar parte de la primera plantilla; Néstor Díaz, Diego Alende y Pape Cheikh ya han debutado con el primer equipo y otros como Iván Villar o Brais Méndez han sido llamados por la Selección Española Sub-19. Es decir, al fin y al cabo, la razón de ser de un filial.
Una plantilla compensada, con juventud y experiencia
En este primer tramo de la temporada 2015/2016 el Celta B ha conseguido formar un bloque que combina juventud con experiencia. En la portería Néstor Díaz (270 minutos) se ha hecho un hueco en las últimas semanas en un puesto que Iván Villar (1.350 min.) había defendido hasta ahora. Mientras, Ángel Fraga espera su oportunidad.
En línea defensiva, solo dos jugadores esperan su debut: Sergio de Paz y Francisco Duclós. El resto se han ido repartiendo los minutos, ya sea por rotaciones o sanción. Kevin lo ha jugado prácticamente todo (1.615 min.), seguido por Jonathan de Amo (1.290) y David Goldar (1.245). Lucas Olaza (888) y Samu Araújo (1.008) que se han ido alternando la posición, aunque en la últimas semanas juegan juntos.
Caso aparte es el de Diego Alende, que con el filial ha jugado 518 minutos y otros 130 con el primer equipo, haciendo por el momento un total de 648 minutos en su último año en edad juvenil.
El mediocampo es quizás la línea que tiene un claro dueño, Borja Fernández. El canterano es quien lleva la manija del filial con un total de 1.440 minutos jugados por el momento. Inmediatamente después, el jugador más utilizado es Pape Cheikh (801), seguido de Jordan (712), Borja Peña (263), Brais Méndez (62) y Martín Fuentes (4 minutos), debutante este fin de semana.
Por delante, multitud de jugadores se han alternado las posiciones, aunque Luis Rioja ha sido el más utilizado por Javier Torres con 1.373 minutos disputados, seguido por dos de los nuevos Franco Fragapane (963) y Rubén Ramiro (895) y un gran Julio Delgado (839).
En la delantera, el referente ha sido por el momento Borja Iglesias (1.480), seguido de un Guille Andrés (683) que se ha destapado en las últimas semanas y, por último, un Javier Que Delgado que aún no ha disputado demasiados minutos, tan solo 58.
Ver: Plantilla Celta B 2015/2016
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