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| Foto: Amanda Estévez y Marta Vigo |
Con "el nervio" de volver a Balaídos –"juego con el Celta en la Liga Indoor, me sigo considerando un celtista y mi máxima aspiración sigue siendo algún día entrenar a los porteros del Celta", advierte– analiza al que fue su equipo y dice que "tiene una delantera temible, con un jugador de moda que lo quieren muchos equipos pero que ha renovado". Pero enseguida mira entre los palos para decir que "tiene dos porteros que he tenido la fortuna de entrenar durante cinco años. Y el otro (Yoel) que se fue traspasado al Valencia. De parte de lo que ellos son como porteros me siento un poco partícipe por haberles enseñado un montón de cosas. Y creo que ellos me valoran tanto como amigo y como entrenador". Desde tal posición analiza a los dos metas célticos y a los suyos propios, Vicente Guaita (recién llegado desde el Valencia) y Jordi Codina.
Rubén Blanco
"Cuando empezaba y era un niño, veíamos que era un proyecto de portero de Primera y además de equipo grande. Por edad, por jerarquía, por cómo lo está haciendo en las categorías inferiores de la selección nacional… Tiene todos los condicionantes de portero moderno: juego de pies perfecto, tranquilidad, toma de decisiones correcta".
Sergio Álvarez
"Es un portero ágil, rápido, vivo, con buen manejo en el juego de pies. A veces se cree que su altura es un hándicap para el juego aéreo, pero yo creo que es un portero que cuando sale suele blocar y mete buenos puños. Decide muy bien, se equivoca muy pocas veces en el juego aéreo a pesar de su estatura porque tiene muy buen salto. Su virtud es que es rapidísimo en la toma de decisiones. Lo hemos trabajado mucho con él. Me gusta verlo cuando hace esas paradas límite. Profesional total".
Con estos "porteros de garantías", Emilio espera ver a Celta y Getafe "del décimo para arriba y a ver si uno de los dos tiene la suerte de entrar en Liga Europa".
Publicado por Redacción
Fuente: Atlántico Diario
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