Un tesoro llamado Hugo

2 de junio de 2014
Foto: Getty Images
Hugo Mallo tenía poco más de 18 años cuando Eusebio Sacristán le dio la oportunidad de su vida. Ni siquiera llegó a pasar por el filial. Dio el salto directamente del juvenil al primer equipo, entonces en Segunda División, tras convencer en pretemporada al técnico de La Seca. Desde el 29 de agosto de 2009, día en el que se produjo su debut contra el Numancia en Balaídos, acumula más de 150 partidos oficiales con el Celta cuando aún no ha cumplido los 23 años y a pesar de que a principios del año pasado sufrió una grave lesión de rodilla que le obligó a pasar medio año en el dique seco. Sin embargo, en la temporada recién finalizada reapareció a un magnífico nivel, fue un fijo para Luis Enrique Martínez y volvió a llamar la atención de equipos como el Valencia o el Inter de Milán, que hoy suspiran por hacerse con los servicios de uno de los laterales con más proyección del fútbol español.

"Hace tiempo que a Hugo le vienen siguiendo y hay equipos que han preguntado por su situación, pero hasta ahora no han dado el paso definitivo y no sé si lo van a hacer este verano", asegura Mario Parri, representante del jugador. A día de hoy, no hay ninguna oferta en firme por el lateral de Marín. Ni siquiera ha habido movimientos significativos en torno a su figura desde que acabó la Liga. Pero quedan tres meses de mercado de verano por delante y el nombre de Hugo comienza a sonar cada vez con más asiduidad. Sin ir más lejos, esta semana volvió a relacionársele con el Valencia y ayer mismo con el Inter de Milán. "Rumores siempre hay y sí es verdad que el Valencia le sigue desde el año pasado. Ahora el club está en una nueva situación y no sé si darán el paso", explica Parri.

En cualquier caso, el marinense tiene una cláusula de rescisión de 20 millones de euros que a priori se antoja excesiva, por lo que quien realmente esté interesado en hacerse con sus servicios intentará negociar con el club. No será fácil. "Si no pagan la cláusula, el Celta no se desprenderá del bloque que tanto nos ha costado construir", aseguró recientemente el presidente y máximo accionista del club vigués, Carlos Mouriño. La relación entre los responsables de la entidad y Hugo Mallo es magnífica y el jugador en ningún caso tratará de forzar su salida, entre otras cosas porque se encuentra muy a gusto en Vigo. "Mi meta es jugar el máximo número de partidos con el Celta porque soy feliz aquí. Ojalá esté aquí hasta que acabe mi carrera, aunque sabemos que es muy complicado", reconoció recientemente en una entrevista a este diario.

Sea como fuere, en caso de que el interés de un "grande" cristalice en una oferta irrechazable, el marinense apueste por dar un paso adelante en su carrera y así se lo haga ver a los dirigentes celestes, el Celta estaría dispuesto a negociar el precio de su traspaso.

Si finalmente no es así, estará en disposición de seguir batiendo récords en un equipo del que ya es segundo capitán con apenas 22 años. El mérito de esos más de 150 partidos oficiales que acumula resulta evidente si tenemos en cuenta que jugadores como Iago Aspas o Roberto Lago no alcanzaron dicha cifra hasta que cumplieron los 26 años y Oubiña lo hizo con 29. Hugo tiene presente y futuro, pero está por ver si en el Celta.


Publicado por Redacción


Fuente: Atlántico Diario